Solo un 15% de las mujeres empresarias de la Alianza del Pacífico exporta periódicamente

Incluso antes de la llegada de la pandemia, ser mujer empresaria no era fácil. En los países que conforman la Alianza del Pacífico -Chile, Colombia, Perú y México- no es la excepción.

Esto se plasma en el estudio diagnóstico "Radiografía de la participación de las mujeres empresarias de la Alianza del Pacífico en el comercio exterior", elaborado por el Grupo Técnico de Género del foro junto al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con el fin de conocer la situación de las ejecutivas que lideran firmas exportadoras y con dicho potencial.

Una encuesta aplicada a 1.993 mujeres empresarias en los cuatro países y 43 entrevistas, muestran que el 48% de las participantes es la única dueña de su empresa, mientras que el 89% ejerce un rol directivo en su organización.

En cuanto al tamaño, predominan las microempresas: el 73% corresponde a ellas, seguidas del 20% que representan las pequeñas empresas. Solo el 5% de las firmas son medianas, mientras que el 2% del total son grandes compañías.

En los cuatro países, dichas firmas se concentran geográficamente en las capitales y principales ciudades, y sus sectores principales de actividad económica son los servicios y los alimentos y bebidas.

Sumado al perfil, el estudio evidencia que solo un 15% de las firmas realiza envíos internacionales periódicamente, y el 82% de estas son micro y pequeñas empresas. Pero, según la autora del estudio y coordinadora para los países andinos de la División de Comercio e Inversión del BID, Alejandra Villota, "las mujeres empresarias pueden jugar un rol clave para dinamizar el comercio intra-Alianza".

A nivel agregado, casi el 40% de las empresarias encuestadas exporta el menos a un país del bloque, y para las representantes de Chile y Colombia, los demás miembros de la Alianza figuran en sus cinco principales destinos de envíos, explica la experta.

Si bien el 60% de las líderes del sector privado no se declara exportadora, sí afirma que tiene la intención de iniciar un proceso de internacionalización, lo que según Villota "muestra el potencial existente para aumentar la participación de las empresas propiedad de mujeres en la actividad exportadora".

En términos concretos, para el 50% de las empresarias las exportaciones representan menos del 25% de sus ventas anuales, mientras que solo para un 23% del total, los envíos corresponden a más de un 75% de sus ventas por año.

Desde otro ángulo, para el 80% de las empresarias los ingresos por exportación son inferiores a los US$ 200 mil, y tan solo un 7% realiza envíos por un monto promedio anual superior a US$ 1 millón.

Levantar las barreras

El 57% de las empresarias declara que debe autofinanciarse, lo que según la autora refleja que "la autosuficiencia otorgada por los fondos propios no es sostenible en el tiempo, señala un nivel insuficiente de inversión, convirtiéndose tarde o temprano en un techo al crecimiento de la empresa".

El estudio plantea justamente que una de las principales barreras para el crecimiento e internacionalización es el financiamiento. Se suma la falta de redes profesionales y de contactos comerciales para acceder a oportunidades de negocios, y el acceso limitado a desarrollo y capacitación formal para las necesidades específicas de mujeres empresarias.

Para abordar estas limitaciones, el BID recomienda a los países adoptar medidas en estos tres ejes. Sugiere promover las facilidades y beneficios que ofrece actualmente la Alianza y dice que sería "altamente efectivo" realizar una rueda de negocios para incentivar los encadenamientos productivos entre empresas de mujeres del bloque. También insta a generar un ambiente general favorable de negocios para las mujeres, que contemple cooperación entre el sector privado y público, entre otras acciones.

Pero no todo son problemas. Pensando en oportunidades, Villota plantea que el comercio electrónico se vislumbra como "el protagonista entre los canales de entrada a los mercados internacionales", sobre todo para las microempresas, donde más del 30% realiza transacciones de ecommerce transfronterizo.